02 de noviembre.- Calaveras de Dzunum 2008

 

 

 

    

 

Felipe Calderón

“No entendiste Calderón
el clamor de los hambrientos”
¡No a la globalización!


“Pero si terca es la mula
Tú, ya no tienes perdón”


La voz, vino de ultratumba,
la muerte lanzó el sermón.
Felipe quedó pasmado
y luego dio el azotón.

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La calaca fue sensata:
y esperó la absolución
para estirarle la pata.


Ya va camino al panteón
Y no volverá a dar lata.


Dos años de mal gobierno
actuando sin ton ni son
costarán a Calderón
ir a pudrirse al infierno.

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A modo de testamento,
Del Sagrado Corazón
dejó un vulgar documento
He aquí, su reproducción:


“¡México estará jodido
a menos que se rescate
nuestro tesoro escondido”

(¡No olviden el malacate!)


Dzunum



López Obrador

Tin marín de do pingüé
El Peje ya no se ve
Vino por él la calaca
cúcara mácara
títere fue.

Estaba muy disgustado
por la farsa petrolera
pues fue “tomada de pelo”
la “reforma” puñetera

Manuel López Obrador
leyendo con atención
detectó que la “reforma”
dejó las puertas abiertas
a la privatización.

La observación de Manuel
el buen juicio la respalda
aunque más de un desgraciado
senador o diputado
le haya volteado la espalda.

Antes del último viaje,
Andrés López Obrador
escrito dejó un mensaje
dirigido a Calderón :

¡No traiciones a la Patria
con la privatización
de Petróleos Mexicanos!

¡Fuera manos Calderón!
¡Basta ya de que te limpies
con nuestra constitución!
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Dzunum
 

Josefina Vázquez Mota

¡Ni un paso atrás con la alianza
por la buena educación!
(grabado está en una losa
de un olvidado panteón).

Josefina Vázquez Mota
descansa en este rincón.

Aguantó a la Esther Gordillo
Y de paso a Calderón
mas no pudo con la muerte
no obstante su educación.

Era una mujer ladina
(como dice la canción)
como aquella Josefina
que domaba a Napoleón.
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La “alianza” sólo es la llave
de la privatización
del sistema educativo
y la desintegración
del artículo tercero
de nuestra constitución.

Un esqueleto rumbero
nos trajo la solución.

Ahora sí ¡Viva la CNTE!
del Estado de Morelos
Y de toda la nación
Y ¡Viva también la gente!
(como dice otra canción)

Dzunum


Onésimo Cepeda

¿Cómo fue que te ordenaste?
sacerdote del infierno
¿Si tu vida has dedicado
(como dijera el corrido)
“para ofender al eterno”?

(Así habló un mugre esqueleto
que a Onésimo dejó quieto)

Mas ya pasado un minuto
y al fin y al cabo “hablador”
el obispo delincuente
se sirvió otro “Jimador”
para sentirse valiente
y gritó: ¡Tu servidor!
¡Pinche esqueleto corriente!

Cuando creyó que el calor
era por el aguardiente,
vio un gran incinerador
y la muerte muy decente
dijo ¡Pase monseñor!
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Ahora Ecatepec descansa
sin este defraudador.

Dzunum
 

Peregrinos de Mictlán al Anáhuac

01 de noviembre.-Espléndida la celebración mexicana del Día de los Muertos: Los hermosos altares, la flor de cempasúchil de agradable aroma y color de oro viejo, el papel de China  multicolor picado artísticamente, las calaveras de azúcar con nuestro nombre en la parte frontal destellando luz en el brillante papel metálico que las adorna.

Los panteones pueblerinos, plenos de flores y, sus lápidas y tumbas, brillantes y limpias. Los platillos típicos sobre las lápidas, verdaderos manjares: tamales, mole, calabaza melada, enchiladas, pan de muerto y la bebida que haya sido preferencia del difunto (en el caso de adultos); porciones de comida en miniatura y pequeños juguetes, en el caso de niños.

Velas, veladoras, estampas de santos y fotografías diversas de los deudos a quienes se agasaja o de personajes a quienes se admira o quiere.

Cancioneros, rezanderos y plañideras, mariachis, notas musicales y rezos que en confusión se van con el viento frío de noviembre.

Arte, fantasía, imaginación, magia, sensibilidad de nuestro noble pueblo mexicano que vela en panteones o ante altares hogareños a sus seres queridos que en días de muertos peregrinan desde Mictlán para venir a recibir las ofrendas de los vivos que siguen amándolos.

                                                                                                Dzunum                 

 

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